Actualmente el uso de las mascarillas ha generado mayor atención en la parte superior del rostro, exponiendo las imperfecciones de las líneas de expresión en la frente y alrededor de los ojos. El Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma ofrece diversos tratamientos con toxina botulínica para conseguir una mirada más expresiva, reluciente y menos cansada.
La doctora Rosario Ramírez, nos recomienda la aplicación de la toxina botulínica a partir de los 25 años, ya que la piel empieza a disminuir la producción de colágeno y elastina evidenciando las líneas de expresión en el rostro.
- La duración del bótox es de 4 a 6 meses, lo ideal es aplicarlo cada 6 meses.
- Las dosis van a depender de la fuerza de contracción muscular y de las zonas a tratar. Por ello, se debe realizar una evaluación médica.
- La toxina botulínica previene y/o reduce de forma temporal las líneas de expresión.
- Se puede aplicar en las patas de gallo, frente y entrecejo. También es muy efectivo para mejorar la sonrisa gingival, darle al cuello un “efecto Nefertiti”, en el músculo masetero (en caso de bruxismo), y para corregir la sudoración excesiva (hiperhidrosis).
- Se recomienda su aplicación de modo preventivo a partir de los 25 años y de modo correctivo a partir de los 30, edad en las que las líneas de expresión ya se encuentran presentes y marcadas. Es muy importante realizarse una evaluación médica previa donde el especialista podrá definir el tratamiento a seguir y absolver las consultas de los pacientes.