• Los sectores: textil, alimentos y servicios/consultorías, son los que lideran el número de “Empresas B Certificadas” en el país.
  
  

La sostenibilidad empresarial dejó de ser una respuesta a una necesidad puntual, para convertirse en un compromiso constante, logrando un impacto significativo a nivel económico, social y medioambiental. Perú, es un país que viene escalando. Según un informe de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN), el Perú se ubica en la posición 63 de 165 países comprometidos con el cumplimiento indicado por los Objetivos de Desarrollo Sostenible  (ODS) .

Cada vez son más las empresas que han puesto en marcha su propia estrategia para contribuir a estos objetivos. Hoy, el país cuenta con un colectivo denominado “Empresas B”, impulsado por la organización Sistema B, en busca de cambiar el comportamiento y la cultura empresarial, bajo un compromiso de mejora continua en cinco áreas de la organización: Gobierno, Trabajadores, Clientes, Comunidad y Medio Ambiente.

“Hay un nuevo modelo de capitalismo en marcha. Es necesario que los principales actores del mercado replanteen su modelo económico buscando el equilibrio entre el propósito y las ganancias. Los consumidores apoyan a marcas que compartan sus valores, que les genere confianza y que garanticen la integridad de los productos o servicios que ofrecen, además de involucrarse a causas sociales” precisó, Antonio Talledo, Co-Presidente de Sistema B Perú
Sectores sostenibles en el tiempo

Actualmente, los sectores: textil, alimentos y servicios/consultorías, son los que lideran el número de “Empresas B Certificadas”. Estas vienen aportando soluciones, en busca de minimizar los costos de producción y vinculando procesos más circulares que también aportan en la economía de los negocios con propósito, generando valor social y ambiental en todas sus operaciones. A través de la implementación de energías renovables.

En el caso textil y la reducción en la huella de carbono. Textil del Valle, es la primera empresa textil Carbono Neutral del hemisferio .

El sector de servicios y consultoría también están liderando un cambio y mejoras continua. Un claro ejemplo es la Empresa B, Ikigai que busca ser el soporte y el aliado de otras organizaciones, para ayudarlos a que su inversión tenga un impacto real; y, por otro lado, Modo Sostenible, acompaña a las empresas en el proceso de crecer, generando valor social y ambiental con todos sus grupos de interés.

Finalmente, en el sector de alimentos, cada día está más comprometido con su cadena de valor, con pago justo a las manos productoras, así como apuestan por los procesos más orgánicos.

Desafíos a la vista

El Co-Presidente de Sistema B Perú, también menciona que las empresas al adquirir esta certificación se exponen a grandes desafíos de rigurosidad, ya que, el compromiso y continuidad en el desarrollo e innovación son cada vez más estrictos y de alta demanda al ser parte del cambio. “Uno de los principales retos que las organizaciones asumen, cuando deciden apostar por la sostenibilidad, es incorporar de manera consciente y estratégica en todos los niveles de la organización, debido a que todos deben de estar alineados a los objetivos”.

Cada “Empresa B” en el Perú, se vuelve más consciente, transparente y sustentable. Actualmente, son 46 quienes son parte de esta iniciativa e involucradas por el cambio, con el fin de identificar sus fortalezas y, también, posibles puntos de mejora y oportunidades para ser un agente de cambio en la economía. El reto parte en mantener la sostenibilidad en el tiempo, la cual vemos que se encuentra en constante transformación de los diferentes mercados. Es allí cuando se presenta el verdadero compromiso con la sociedad y el medio ambiente.